Nathalie empezó a impartir clases de francés en 1990, cuando apenas hacía un año que había llegado a Barcelona. Pronto se dedica a la enseñanza del idioma en entornos empresariales, teniendo como alumnos a representantes de todos los niveles jerárquicos y departamentos. Con el tiempo se  especializa en directivos, a los cuales aporta una visión pragmática y sólida en el aprendizaje. Esta especialización no le impide abarcar un amplio espectro de perfiles que van desde adolescentes hasta personas de edad avanzada, tanto en grupo como a nivel individual.

Su filosofía de enseñanza se basa en crear un clima de confianza con los alumnos, que les hace ser más permeables al aprendizaje y vencer sus temores a expresarse en un idioma extranjero. En los grupos busca la participación de todos y cada uno de los integrantes a partir de enfatizar sus puntos fuertes, y en las clases particulares se orienta hacia los temas de interés del alumno para así facilitar su evolución.

Otro pilar de su método es consolidar las bases del idioma e introducir nuevos conceptos en el momento más adecuado para su comprensión.

Se siente plenamente integrada en Barcelona, ciudad a la que llegó para aprender español y que la sorprendió con un segundo idioma, el catalán, en el que también se expresa con fluidez. A nivel de aficiones combina el deporte, con la cocina, las actividades culturales y la lectura.